Un deseo

Un deseo… que se vuelve realidad. Un deseo que nace del centro de tu pecho. Un deseo que anhelas desde el primer día en conoces el amor. Una comunicación que en algún minuto fue clara y directa con el universo, una mirada directa al espejo, hablándote a ti mismo y deseando lo que realmente te mereces. Ocurre en un momento en el cual el amor por ti mismo, no se alberga solo en vanidad o pretensión – si no que se manifiesta - sale, se ocupa de ti. Poniéndose por delante, puedes ver como goza, disfruta, se divierte, es libre al fin… esa armonía mente-palabras-corazón existe, cuando llega se queda, ¿Cómo el ser va a querer volver a no sentirlo? Llega para quedarse.